domingo, 26 de febrero de 2017

Antonio José “Toñito” Espinoza Prieto



 ANTONIO JOSÉ “TOÑITO” ESPINOZA PRIETO

Escribo estas palabras, en volandas, para dejar testimonio de admiración y reconocimiento a este notable venezolano Antonio Espinoza Prieto, quien falleció el jueves, 23 de febrero de 2017, a la edad de 84 años.   

Espinoza Prieto nació en La Asunción (isla de Margarita), capital del estado Nueva Esparta,  el 22 de diciembre de 1932, sobrino del gran educador Luis Beltrán Prieto Figueroa. Fue abogado, Doctor en Derecho, especialista en Derecho del Trabajo, docente de Derecho del Trabajo en la Universidad Central de Venezuela y la Universidad Católica Andrés Bello, Miembro de Número y Director General Emérito del Instituto Venezolano de Derecho Social, Presidente de la Asociación Venezolana de Abogados Laboralistas (LABOR).
Se convirtió en un ardoroso defensor de la clase trabajadora venezolana y de sus derechos laborales. En el Derecho del Trabajo, el tema en el que dedicó la mayor parte de estudio e investigación fue la Estabilidad Laboral. Impulsó la lucha contra la reforma laboral aprobada en 1997, en el gobierno de Rafael Caldera, solicitando junto con otros juslaboralistas y parlamentarios del anterior Congreso Nacional, su nulidad por inconstitucional. En dicha reforma se estableció entre otros aspectos, la eliminación del pago doble de las prestaciones sociales por despido injustificado y se fijó un máximo de pago de 150 días de salario. 

Fue corredactor de la actual Ley Orgánica del Trabajo, de los Trabajadores y Trabajadoras aprobada en mayo de 2012.
Deja un legado encomiable de obras en materia del trabajo, entre las que destacan: “A propósito de la Estabilidad en el Trabajo” (1963); “Estabilidad en el Trabajo” (1969); “En defensa de la estabilidad en el trabajo” (1970); Proyecto de Ley de Estabilidad en el Trabajo y exposición de motivos” (1969); “Naturaleza jurídica de las Comisiones Tripartitas Laborales”, (1985); “El régimen de prestaciones sociales” (1992); “Vida, pasión y muerte de la estabilidad en el trabajo”, 1989; “La infamia de la reforma laboral”,(1997); “Vivencia de la estabilidad en el trabajo”, (2000); “Teoría General de la estabilidad en el trabajo”, (2000); “Despido indirecto y efectos patrimoniales del retiro”, (2000); “Derechos Laborales en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela” (2000); “Contribuciones a la reforma laboral” (2010).
También incursionó en la poesía, dejando seis obras publicadas en ese género literario. En uno de sus libros en materia laboral, incluyó un epígrafe en el cual evidencia su vena poética: “Como poeta tengo una vida interior que vivo intensamente. Como jurista creo que una idea jurídica solo in péctore, es lo que Juan Ramón llamaría un crepúsculo subterráneo”
Algunas de sus obras en el ámbito laboral