ANTONIO JOSÉ “TOÑITO” ESPINOZA PRIETO
Escribo estas palabras, en volandas, para dejar testimonio
de admiración y reconocimiento a este notable venezolano Antonio Espinoza
Prieto, quien falleció el jueves, 23 de febrero de 2017, a la edad de 84 años.
Espinoza Prieto nació en La Asunción (isla de Margarita), capital del
estado Nueva Esparta, el 22 de diciembre de 1932, sobrino
del gran educador Luis Beltrán Prieto Figueroa. Fue abogado, Doctor en Derecho,
especialista en Derecho del Trabajo, docente de Derecho del Trabajo en la Universidad
Central de Venezuela y la Universidad Católica Andrés Bello, Miembro de Número y
Director General Emérito del Instituto Venezolano de Derecho Social, Presidente
de la Asociación Venezolana de Abogados Laboralistas (LABOR).
Se convirtió en un ardoroso defensor de la clase trabajadora
venezolana y de sus derechos laborales. En el Derecho del Trabajo, el tema en
el que dedicó la mayor parte de estudio e investigación fue la Estabilidad
Laboral. Impulsó la lucha contra la reforma laboral aprobada en 1997, en el gobierno
de Rafael Caldera, solicitando junto con otros juslaboralistas y parlamentarios
del anterior Congreso Nacional, su nulidad por inconstitucional. En dicha
reforma se estableció entre otros aspectos, la eliminación del pago doble de
las prestaciones sociales por despido injustificado y se fijó un máximo de pago
de 150 días de salario.
Fue corredactor de la actual Ley Orgánica del
Trabajo, de los Trabajadores y Trabajadoras aprobada en mayo de 2012.
Deja un legado encomiable de obras en materia
del trabajo, entre las que destacan: “A propósito de la Estabilidad en el
Trabajo” (1963); “Estabilidad en el Trabajo” (1969); “En defensa de la
estabilidad en el trabajo” (1970); Proyecto de Ley de Estabilidad en el Trabajo
y exposición de motivos” (1969); “Naturaleza jurídica de las Comisiones Tripartitas
Laborales”, (1985); “El régimen de prestaciones sociales” (1992); “Vida, pasión
y muerte de la estabilidad en el trabajo”, 1989; “La infamia de la reforma
laboral”,(1997); “Vivencia de la estabilidad en el trabajo”, (2000); “Teoría
General de la estabilidad en el trabajo”, (2000); “Despido indirecto y efectos
patrimoniales del retiro”, (2000); “Derechos Laborales en la Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela” (2000); “Contribuciones a la reforma
laboral” (2010).
También incursionó en
la poesía, dejando seis obras publicadas en ese género literario. En uno de sus
libros en materia laboral, incluyó un epígrafe en el cual evidencia su vena poética:
“Como poeta tengo una vida interior que
vivo intensamente. Como jurista creo que una idea jurídica solo in péctore, es
lo que Juan Ramón llamaría un crepúsculo subterráneo”
Algunas de sus obras en el ámbito laboral |